atablero.com | La importancia del bote en categorías de formación

Aquí os dejo un interesante acercamiento al trabajo técnico en categorías de formación, publicado en uno de los blogs que más me gustan por su buen gusto en el diseño y la presentación de los temas que trata. En este caso lo enfoca sobre el bote, pero en realidad es una invitación para reflexionar sobre el peso que le damos a la táctica individual en nuestros entrenamientos.

En las categorías de formación y siempre dependiendo del nivel de los jugadores, evaluamos y ponemos en práctica muchos ejercicios de técnica individual. Se antojan básicos para cualquier chico o chica que esté empezando a jugar a baloncesto. Entre los ejercicios más socorridos están por supuesto los de la mejora del bote de balón. Ponemos tanto interés que incluso compramos pelotas de tenis para que los niños las intenten dominar. Queremos que incluso sepan utilizar también la mano izquierda. O la derecha. Que sean ambidiestros si puede ser. Y que den un pase tras bote con cualquiera de las dos manos. Eso ya son palabras mayores.

Estamos de acuerdo en que botar es parte fundamental de nuestro deporte. Queremos un base o dos, o tres, que sepan botar y que no pierdan ningún balón “tonto”. Lo que nos planteamos ahora es la importancia real que tiene el bote en el baloncesto actual y la evolución de un jugador a lo largo de su formación.

En la etapa inicial es evidente que los niñ@s deben aprender a botar con ambas manos, hacer ejercicios, cambios de mano, etc. Es parte fundamental para luego desarrollar buenos jugadores. No podemos olvidar ningún detalle e incidir mucho sobre ello.

La importancia del bote se diluye cuando comenzamos a tratar al jugador de formación como parte de un equipo en formación. En un equipo infantil o cadete (siempre dependiendo del nivel general y nuestro nivel de competición) debemos tratar que los botes en el juego en equipo sean los menos posibles. Tenemos que incidir en la calidad de los botes. Tanto técnicamente, como tácticamente.

Es decir, buscaremos que los chic@s entiendan que “cuando boto es por algo”. Para ganar ventaja hacia canasta, para superar a un defensor o para tener una línea de pase mejor. Los movimientos sin balón y ocupar los espacios serán otras de las indicaciones que más valoraremos. El pase antes que el bote, el famoso “pasar y cortar” que tantos detractores comienza a tener, se antoja esencial  para tener claros estos conceptos.

Después, se enseñará a pasar y cortar sin ser un robot. Se podrá pasar, ver y cortar. Pasar, ver y elegir el movimiento al espacio libre. Ver, pasar o botar. La libertad del jugador es en cierta manera un riesgo que debemos asumir y que tenemos que potenciar. Estableceremos una base que los chic@s tienen que aprender y respetar para después “volar libres”. El mejor jugador no será sólo el que mejor cualidades tenga, sino el que mejor entienda esos conceptos básicos y los aplique mejor en cada situación. Y eso también depende del entrenador.

Álvaro Rodríguez

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